sábado, 8 de junio de 2013

¿QUÉ ES EL SOCIALISMO?

Esto que tienes aquí pretende ser un tratado de lo que a día de hoy (2013), desde Impresiones A Trompicones (IAT), es lo que entendemos que es la síntesis de la evolución del movimiento socialista europeo.

 Consideramos nuestro aporte como un reflejo de lo que son, a nuestro juicio, las más importantes divisiones y contradicciones que se dieron durante su desarrollo histórico. Esta crítica pretende formularse desde el respeto a lo que piense cada unx, pero sin negar la historia ni las raíces libertarias de esta editorial. Esperamos que nadie se sienta ofendidx y sirva para abrir nuevas vías de debate en torno a cómo conseguir liberar a la humanidad del yugo del capitalismo, sin repetir viejos errores ni caer en falsas promesas, volviendo a plantear las metas objetivas de dicho movimiento.


* Se ha empleado el plural masculino al referirse a ambos géneros, para facilitar que se lea en voz alta. Con esta nota queremos denunciar las raíces patriarcales, de la cultura y el idioma en el que fue escrito originalmente este texto, que excluyen incluso del plural a las mujeres y no sólo cultural y socialmente.



 

ANEXO

 HASTA DONDE LLEGA LA MEMORIA PRINCIPIOS DEL SIGLO XIX
 La Cuestión Social, preocupación que se desarrolló en los círculos intelectuales franceses en torno a las desigualdades sociales, que dio origen a las doctrinas socialistas, comenzaría a formularse como tal más o menos por la época de la Revolución Francesa, cuyos precursores más renombrados eran unos listillos con la tripa llena, ajenos a los problemas de la gente en nombre de la que decían hablar, como Tocqueville, Rousseau, Montesquieu y demás... Precursores, al mismo tiempo de las bases ideológicas de las que surgió el modelo de sociedad estatocrática que gobernaba hasta día de hoy (esperamos que cuando esto se lea, la humanidad haya progresado lo suficiente para que ya no existan ni Estados ni Gobiernos). 

A raíz de la Revolución Industrial cambió el concepto de “acumulación de poder”, centrándose más en variables económicas que de procedencia, como hasta entonces, siendo un diferenciador social cardinal el acceso a recursos en función del capital disponible. Por tanto, los colectivos sociales encargados de activar los mecanismos de producción mediante su mano de obra quedaban excluidos, además de en la toma de decisiones, de lo poco que les dejaban gestionar en el reparto de su trabajo, mediante primitivas* redes comunitarias, imponiendo la institucionalización y las leyes del emergente mercado liberal, y por tanto desposeídxs y perdiendo la poca autonomía de la que gozaban como estrato social de cara a su integración en un modelo de gobierno desfavorable. Desde entonces y por Ley, el producto de nuestro trabajo pertenece al empresario o “socio” capitalista, el único que ni trabaja ni produce nada y sólo manda por tener más dinero que quienes tienen la desgracia de trabajar para él (nadie se ha hecho rico JAMÁS por medios honrados). 

* Primitivas en cuanto a su fuerte componente religioso. 

Se dio origen a un nuevo modelo de sociedad cambiante y menos humano que lo divino: industrial, urbano y devastador en su imparable e interminable proceso de “modernización”... 
“Un obrero es más rentable que un esclavo, a un esclavo le tienes que dar casa y comida, a un obrero le cobras por ello”.

 Ya por 1812 estaban lxs llamadxs Ludditas o “mecanoclastas” que quemaban fabricas y rompían máquinas, para combatir la lógica tecnocrática de la imposición de fórmulas matemáticas de mercado a la organización del trabajo, en función de la rentabilidad que ofrecían los nuevos avances tecnológicos en relación al coste de mano de obra, sin importar el coste humano. Lxs Ludditas fueron lxs primerxs en sufrir las consecuencias y luchar contra los procesos de industrialización y por tanto contra el asqueroso mundo que nos ha tocado vivir (y que debemos cambiar). La legalización de los sindicatos* se produjo para apaciguar este movimiento e integrar a la población en el recurso a las instituciones, como mediadores sociales, para contener dicho conflicto y suavizar de cara a la población los procesos de industrialización. 

 * Recordamos que el sindicalismo es sólo un modelo de asociación obrera, no el único.


 LA REVOLUCIÓN DE 1848 EN FRANCIA

Después de la Revolución Francesa el resto de reyes se enfadó mucho y les obligaron a hacer la Restauración y poner a otro rey (Luis Felipe), prohibiendo entre otras cosas, las reuniones políticas, la gente se enfadó más aún y el 23 de febrero liaron una insurrección de miedo y montaron la Segunda República Francesa, declarando lo que sería el modelo de corta y pega de Constitución Liberal: libertad de asociación, reunión y todo eso... pero manteniendo el régimen de explotación, las desigualdades sociales, machacar al más débil, el abuso de poder, la competencia...

 A raíz de esto, los gobiernos se sienten obligados a hacer constituciones de cara a la limpieza facial de cada Estado, aunque luego no las hagan caso. 
“Más que por derechos habría que luchar por hechos”.

 En este mismo año a Marx y a Engels, que no les gustó nada esta Revolución del 48, les da por escribir el Manifiesto Comunista, en el que se hace una de las más importantes declaraciones de intenciones del movimiento socialista, poniendo de manifiesto la situación de indifensión de las clases trabajadoras al estar los medios de producción en poder de las clases ociosas (burguesía, nobleza, nuevxs ricxs...). Criticando los fundamentos en los que se basa el modelo de división del trabajo en el contexto del capitalismo emergente, cuyo eje central es el acceso a los recursos de acuerdo al estatus social en función de la variable económica.

 LA PRIMERA INTERNACIONAL (1864-1876) LA ASOCIACIÓN INTERNACIONAL DE TRABAJADORES (AIT)

 El movimiento obrero evoluciona superando las barreras impuestas por nacionalismos y gobiernos, apoyándose mutuamente más hallá de las fronteras que les limitan como pueblos, organizándose en favor de una causa común, la consecución del socialismo y la libertad (necesidad descubierta por el camino) con todas sus consecuencias. En el seno de la misma surgen insalvables discusiones sobre el empleo de las herramientas que utiliza el Estado para subyugar a la población en favor de su liberación, siendo descartadas en esa Primera Internacional las tesis en favor del recurso a las instituciones de gobierno, cuyos defensores deciden fundar la Segunda (y más triste) Internacional. este proceso fue conocido como el Gran Cisma. 

 A todo esto, destacar de camino, el proceso de Unificación de Italia, allá por 1866, durante lo que se conoce como la “resaca de la Restauración” donde Garibaldi la lió parda y Fanelli lo flipó con su colega.

 LA COMUNA DE PARÍS (de marzo a mayo de 1871)
Tras la Unificación de Alemania (Prusia) a Bismark le apetece invadir Francia, el gobierno se achanta y abandona París, entonces la gente, aprovechando el vacío de poder decide poner en práctica el socialismo como modelo organizativo y para hacer frente a los militares prusianos que les invaden. Se revindicaba la autonomía de las comunas que se formaron durante la revuelta, donde la población se organizó empleando sus propias estructuras de base, imponiéndose a los aparatos de gobierno, que demostraron ser ineficaces.

 Finalmente el movimiento fue duramente reprimido por el propio gobierno francés (Napoleón III) en cuanto pudo, que estaba esperando al acecho volver a gobernar en París... Esta revolución frustrada fue un referente para el movimiento obrero desde entonces (ahí coincidieron Marx, Bakunin, Proudhon y muchos mas...)

 JUGANDO A LOS POLÍTICOS LA SEGUNDA INTERNACIONAL (1880-1914) 
Como había mucho intelectual y burgués revolucionado falto de prestigio y despacho entre trabajadores, deciden fundar otra internacional, más acorde con su carrera política, cuya diferencia con la anterior sería el relegar las decisiones de sus integrantes a los deseos de los cuadros dirigentes, encargados de dirigir a las masas en pro de su liberación, empleando partidos políticos y sindicatos como principales herramientas de negociación (o según ellos “de lucha”).

En su seno surgieron terribles contradicciones surgidas a raíz de las tesis socialistas, faltas de una perspectiva antiautoritaria: la socialdemocracia y la deriva hacia el totalitarismo, en plan “dictadura del proletariado”, pero dictadura, dictadura (por suerte para Marx, no estuvo vivo para verlo). 

Se disolvió durante la I Guerra Mundial porque cundió el nacionalismo, cada partido político apoyó a su respectivo país y se fastidió lo de “internacionalista” y “paz entre pueblos”. En 1923 volvió a refundarse, esta vez compuesta por partidos socialistas más moderados, y menos comunistas, como laboristas y socialdemócratas.

 

DE LA LUCHA DE CLASES A LA DEFENSA DEL ESTADO LOS SOCIALDEMÓCRATAS CAMBIAN DE BANDO
  En 1891 se produce una importante transformación en el partido socialdemócrata alemán, a Berstein, releyendo el marxismo y envidiando a los elegantes socialistas ingleses (laboristas), se le ocurre decir que no se puede acabar con el capitalismo y lo que hay que hacer es adaptarse a él. Este proceso se conoce como revisionismo y se centra en un cambio total de estrategias y objetivos, defendiendo la legitimidad de la vía parlamentaria y abandonando toda expectativa revolucionaria, anteponiendo el orden burgués y la consolidación del Estado de Bienestar. Criticaban y detestaban a quienes aún intentaban hacer la revolución y les sentó fatal que se hiciese una en Rusia. 

 El Estado de Bienestar consiste en que el gobierno se encarga de gestionar servicios públicos, accesibles a toda la población, empleando un poquito del dinero recaudado mediante impuestos y dejando la mayor parte para generar un amplio marguen de beneficios para sueldos de políticxs, reforzar los aparatos represivos y garantizar el crecimiento económico, es decir, facilitar las condiciones de explotación y acumulación de capital. Ya que según la lógica del modelo capitalista los gobiernos deben ser rentables.

 Tras la II Guerra Mundial, el modelo de Estado de Bienestar se extiende por numerosos estados con economías desarrolladas (en el contexto del mercado competitivo), principalmente en países de Europa, pero por la década de 1980, debido a las crisis del petróleo, el modelo de Estado de Bienestar dejó de ser rentable y también entró en crisis. Se impuso el neoliberalismo (Reagan, Thatcher...), las políticas de privatización y recortes... Así poco a poco estos servicios que el Estado prestaba han ido menguando a causa de las sucesivas crisis por las que ha pasado la economía mundial hasta día de hoy... A parte de tener cada vez consecuencias más desastrosas, al ser mayor su margen de influencia, sobre el ecosistema del planeta y la población que habita en él.

 Como en el régimen capitalista sólo hay una forma de hacer política, los diferentes partidos de izquierda y de derecha hacen un giro al centro, dados los nuevos tiempos de mercados globales e imperio de los flujos de capital, para favorecer así, desde los gobiernos, las políticas neoliberales, que estimulen el crecimiento económico. Siendo cada vez más imperceptible la diferencia entre un partido de centro-izquierda y centro-derecha, salvo por sus siglas.

CÓMO LA URSS INTENTÓ DOMINAR EL MUNDO O LA 3ª INERNACIONAL 
Marx escribió El Capital, uno de los principales tratados sobre la evolución del modelo capitalista a modo de crítica, que incluso ha alcanzado gran prestigio en los círculos académicos en la rama de la economía. En él se describe la evolución del sistema económico de las sociedades occidentales en sus distintas etapas, describiendo los sucesivos cambios en las estructuras sociales, desde pequeñas comunidades campesinas, hasta llegar a complejos sistemas industriales, dando lugar a una serie de revoluciones burguesas de corte liberal, que originaron la aparición de partidos y sindicatos, los cuales, según la ideología y mesiánicas predicciones de Marx, herederas de la lógica sinsentido positivista, deberían dirigir, como vanguardia el proceso de cambio del modelo social hacia el socialismo y la desaparición de los Estados.

  Pues alguien debió de traducir este libro mal al ruso, porque algunos entendieron otra cosa... Tras la Revolución Rusa de 1917, el partido bochevique, liderado por Lenin se hace con el poder. Lenin entendió, según la obra de Marx, que su partido era la élite de intelectuales marxistas que debía ser la vanguardia que dirigiese el cambio de modelo social, hacia el socialismo, suprimiendo la autonomía de todas las estructuras de base originadas a comienzos del proceso revolucionario (soviets) bajo la dirección de un gobierno central dirigido por su partido, dando lugar a una dictadura totalitaria. Los cuadros del partido bolchevique se hicieron los amos del país, con Lenin a la cabeza. Luego a raíz de que en Rusia no hubo una revolución burguesa ni liberal previa a la revolución comunista, vio necesario imponer un acelerado proceso de crecimiento económico para superar la etapa capitalista y por tanto llegar al socialismo, en un desenfrenado proceso de industrialización del país. Lenin, en lugar de interpretar El Capital como una crítica a la deshumanización del aparato económico, lo entendió como un modelo a imitar.

 En 1919 se funda el Komintern o Tercera Internacional o Internacional Comunista, con la idea de extender el modelo de Revolución Rusa al mundo entero. En cada país donde llegan, se funda un Partido Comunista (PC-Pon la sigla de tu país) para diferenciarse de los de la Segunda Internacional. En 1922 el gobierno de Rusia toma el nombre de URSS.

 En 1924 muere Lenin y hereda el cargo de su camarada Stalin, que se dedica a depurar los cuadros del partido. A lo largo de todo su mandato va eliminando a destacados miembros del partido y antiguos camaradas, para que nadie le lleve la contraria, desaparecen, mueren en extrañas circunstancias o son directamente ejecutados: en 1927 expulsa a Trotski y Zinóviev del partido; en 1929 condena a Bujarin, Ríkov y Tomski acusados de contradecirle; en 1934 muere asesinado Kírov; en 1935 ejecuta a Zinóviev, Kámenev y a otros 17; ese mismo año aprueba la pena de muerte para niños a partir de 12 años; en 1936 muere Gorki y se suicida Tomski; en 1937 hay un proceso ejemplar contra Piatakov, Radek, Sokolnivov y Muralov; en 1938 ejecuta a Bujarin, Ríkov junto con otros; en 1940 muere Trotski asesinado... Stalin aún siguió planificando esta “gran depuración” hasta su muerte en 1953. Durante su mandato se militarizó el funcionamiento de las fábricas, para alcanzar las metas de los planes quinquenales elaborados por el gobierno, agilizando, a ritmo de galera, los procesos de desarrollo industrial para poder competir con las potencias capitalistas. Mientras tanto, se dan episodios de hambrunas entre la población en numerosas regiones del territorio... Eso sí, industrializó el país hasta llegar a ser una de las principales potencias mundiales e hizo cumplir a rajatabla sus planes de desarrollo económico. 

Durante el mandato de Stalin, Rusia combatió en la II Guerra Mundial, haciendo un frente común con potencias capitalistas, también amenazadas por el avance del fascismo (como EE.UU o Inglaterra), derrotando a sus enemigos, los emergentes gobiernos reaccionarios a la causa obrera, vía nacionalista (Alemania, Italia, Japón). Como ya no había nazis con los que pelearse, las potencias que quedaron dominando el mundo, se alinearon en dos bloques (capitalista y comunista) dando origen a la Guerra Fría, que duró hasta 1989. Las dos principales potencias mundiales, EEUU y URSS, se pusieron a competir en una carrera armamentística, amenazando al planeta entero con un conflicto nuclear y provocando constantes guerras indirectas para apropiarse de estados satélites, en favor de los intereses de cada bloque. 

 A Stalin le sucede Jruchev, luego en 1966 toma el mando Brejnev, sin pena ni gloria... En 1985 Gorbachov asume el gobierno del país, en medio de una profunda crisis, para superarla lleva a cabo una serie de reformas conocidas como La Perestroika, un cambio de rumbo radical del gobierno ruso hacia una política parlamentaria y un mercado liberal, más acorde con lo que debería ser una potencia capitalista. Finalmente, con el borracho de Yeltsin se da fin a la URSS en 1991, la repentina privatización de la economía originó un crecimiento incontrolado de mafias por todo el país y no solucionó los problemas de pobreza de la población, estimulando la desigualdad económica y por tanto extremando las condiciones de supervivencia... Al final tanto gobernar un Estado y sufrir privaciones para alcanzar, las masas trabajadoras, el deseado socialismo, en su última etapa y es el gobierno el que decide que es mejor gobernar a la vieja usanza, al estilo liberal.


 Nota Editorial: Para tratar el anarquismo y las derivas antiautoritarias del movimiento obrero, esperamos publicar nuevos títulos específicos al respecto.

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